
No aparece Jorge Julio López.
El señor Lopez se equivocó. Asumió su responsabilidad como ciudadano y se presentó como testigo clave en la causa contra el genocida Miguel Etchecolatz -recluído de por vida- y para la prosecución de otras causas similares.
Ahora, Lopez no da señales de vida. Hace una semana que lo buscan. Es un testigo protegido y la protección asignada no sabe dónde está. Nadie lo sabe. Muchos temen que se convierta en el primer desaparecido desde la recuperación de la democracia.
Será que existen todavía células represivas? Será que la aceitada maquinaria intimidatoria y asesina que reinó los 70 todavía funciona en la Argentina? Será que el totalitarismo militar y la brutalidad policíaca se hermanan y abogan por la misma causa? Intimidación, no te metas, desaparición, secuestros políticos, represión. No eran todas palabras de un pasado negro e infame?
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