El ultimo foco del incendio que azotó las sierras cordobesas durante dias cayo exhausto ante su enemigo. A los pies del Uritorco y ante las lagrimas emocionadas de cientos de bomberos y vecinos, el fuego se extingió. La foto quedó como evidencia de una ayuda que poco podían creer. Pero ahí estaba, alimentando aún más la mística de la zona pro expendiente X. El manto comenzaba a salipicarse de blancos y sagrados copos de nieve.
En qué van a creer los que no creen. (Leandro, 8 años)
No supe qué contestar.
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1 comentario:
Para que el ciclo continue siempre habrá de las dos caras.Y aun cuando creemos que todo está por perderse tenemos un bonus extra de asombro.
Nunca se pierde nada por creer.
L.
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